Cuando hablamos de taxis, surgen muchas dudas acerca del tipo de servicio que ofrecemos. Pero lo cierto es que, aunque pueda llevar a confusión, el taxi es un transporte público. Y, ¿por qué el taxi es un servicio público? Sigue leyendo, hoy en Radio Taxi Ponferrada te lo explicamos.

 

 

Taxi: ¿transporte público o privado?

 

Según el Real Decreto 2822/1998, de 23 de diciembre, en el que se aprueba el Reglamento General de Vehículos (RGV), el taxi es “el turismo destinado al servicio público de viajeros y provisto de aparato taxímetro”.

Como podemos comprobar entonces, efectivamente, el taxi es un servicio público. Pero además, cabe matizar que se trata de un servicio de transporte de viajeros mediante un vehículo con una capacidad mínima de cinco plazas y máxima de hasta nueve personas, incluida la persona conductora.

Dentro de los servicios que ofrecemos los taxistas, podemos señalar dos diferencias:

  • El servicio urbano: aquel que se presta dentro de los límites del término municipal o ámbito territorial metropolitano.
  • El servicio interurbano: cuando se exceden los límites del ámbito de los transportes urbanos.

Pero, ¿por qué el taxi es un servicio público? Se cataloga así precisamente porque es una actividad que está sometida a la intervención administrativa. Es decir, que está regulada por los organismos municipales para garantizar una correcta prestación del servicio a los usuarios. De esta forma, mediante la regulación administrativa, tanto los derechos de los usuarios como los derechos de los conductores se ven garantizados en todo momento.

Pero además, esta intervención también tiene otra finalidad aparte de la de garantizar la calidad del servicio. Y es que con las normativas municipales también se busca alcanzar un equilibrio económico entre la actividad y la autosuficiencia del servicio. Por eso, se establecen ciertas limitaciones en cuanto al número de plazas o a las tarifas.

 

Ordenanzas municipales: taxi servicio público especial

 

Como acabamos de explicar, son los municipios los que establecen sus propias ordenanzas para regular la prestación del servicio de los taxis. Aunque cada municipio puede elaborar su propia ordenanza municipal, todas deben regular unos criterios comunes a todas.

  • Requisitos para la obtención de las licencias: los ayuntamientos son los responsables de adjudicar las licencias de taxi, mediante concurso así como su número máximo. El número de licencias adjudicadas dependerá de las necesidades de la propia ciudad.
  • Forma de transmisión de las mismas: en caso de fallecimiento, las licencias se podrán transmitir a la persona cónyuge viuda o a las personas herederas.
  • Condiciones de prestación del servicio: para poder prestar este servicio, en cualquier caso será necesaria la licencia de taxista. Además, los taxistas deben incorporar un taxímetro homologado en el interior del vehículo a través del cual se indiquen las tarifas establecidas previamente por cada ayuntamiento.
  • Requisitos exigibles a los taxistas: en los municipios de más de 5000 habitantes, los titulares de la licencia deberán dedicarse plena y exclusivamente a esta profesión.
  • Derechos y deberes de los usuarios y de los conductores. En el caso de los titulares de la licencia, no podrán alquilarla, cederla o traspasarla.
  • Tipo de identificación de los vehículos: los ayuntamientos son los responsables de regular la imagen externa de los taxis. Cada ayuntamiento establecerá el color y los distintivos de los vehículos, así como la publicidad externa. Además, como norma general, los taxis deberán ir identificados con una luz verde que indique que circulan en condición de ser utilizados.
  • Régimen de descansos
  • Mecanismos para la resolución de conflictos derivados de la prestación del servicio
  • Previsión de plazas o vehículos adaptados para personas con movilidad reducida
  • Régimen relativo a la inspección, control y seguimiento del servicio y de las licencias

 

Los taxis son un servicio público, seguro y con garantías de calidad

 

Inmersos en una situación extraordinaria como la que estamos viviendo, marcada por la pandemia del coronavirus, los taxis se han posicionado como la mejor alternativa de transporte público. Esto se debe principalmente a dos motivos. Por un lado, la extrema limpieza y cuidado que mantienen todos los taxistas para evitar que se produzcan contagios durante el servicio. Por otro lado, cabe destacar que los taxis son un transporte público en el que apenas se está en contacto con otros pasajeros. A diferencia de los autobuses, trenes o metros, donde diariamente se concentra un gran número de personas, en los taxis esto no sucede. Por lo tanto, podemos concluir que el taxi es un servicio público, cómodo y el más seguro en estos momentos.