Los SRI (Sistema de Retención Infantil), reducen en un 75% las muertes y en un 90% las lesiones de los niños que viajan en coche, pero a pesar de estos significativos datos, hay mucho que debes saber sobre la nueva ley.
Este tema empezó a preocupar a los padres españoles cuando se aprobó la norma que obligaba a los vehículos que circulasen con niños menores de 12 años y con altura inferior a 135 cm a disponer de una silla adaptada para poder circular.
Tal y como establece la ley, desde el año 2005 es obligatorio llevar el correspondiente SRI (Sistema de Retención Infantil) en vehículos particulares, pero hay ciertas excepciones en cuanto a los transportes públicos como son los taxis. Aquí te explicamos todo lo que debes saber antes de coger un taxi en familia.

 

Excepciones de la norma en el taxi:

 

  • Como comentábamos previamente, un gran porcentaje de niños que fallecen en la carretera no van sujetos a un SRI. Está demostrado que el uso de elementos de retención infantil adecuados a la edad y al peso del niño reduce la mortalidad en caso de accidente de tráfico entre un 54% y un 80%. Su uso es obligatorio en todos los trayectos, salvo en excepciones puntuales como en el taxi:
    Los menores por debajo de 1’35cm de altura deben ir atrás: no se puede ir en el asiento delantero hasta que no se superen o los 18 años de edad o los 135 centímetros. La única excepción se da si todos los asientos traseros están ya ocupados por sillas para niños: en estos casos el menor podrá sentarse delante, pero en una silla homologada y adecuada para su altura/peso.
  • Cada silla se monta según sus propias instrucciones: no es obligatorio montar las sillas en una u otra dirección (en el sentido de la marcha o al contrario). Lo que hay que hacer es seguir las instrucciones de ese modelo de silla en concreto. La única excepción es si la silla se monta en un asiento delantero y el airbag no está desactivado: en este caso está prohibido que la silla vaya en el sentido contrario a la marcha.
  • Sin sillita en taxis, pero solo en trayectos interurbanos: los menores pueden ir en la parte trasera de los taxis sin sistema de retención, pero solo si el recorrido es en un área urbana.
  • En vehículos de más de 9 plazas es obligatorio informar: el conductor debe informar a los pasajeros de la obligación de abrocharse el cinturón (o el sistema de retención homologado). Esto se hará mediante letreros, pictogramas o medios audiovisuales, de tal manera que la información sea visible desde cada asiento

 

 

Precauciones especiales con niños en el taxi:

 

El Comité de Seguridad y Prevención de Lesiones en la infancia recomienda que los niños, que no alcancen 135 cm de estatura, y que viajen en taxi deben tener cuidado con las siguientes precauciones:

  • Utilizar SRI adecuados a la edad y el peso del niño, tanto para desplazamientos urbanos como en desplazamientos interurbanos.
  • Seleccionar, en la medida de lo posible, taxis que dispongan de estos elementos ya que actualmente muchos servicios de taxis ya cuentan con vehículos dotados de dichos dispositivos de seguridad infantil.
  • En caso de utilizar el cinturón de seguridad del vehículo, en niños ya con talla mayor o igual a los 135 centímetros, tendremos que vigilar que el cinturón esté correctamente colocado, nunca cruzando el cuello del niño y manteniendo la banda sobre los muslos del niño para evitar lesiones en caso de accidente.
  • Utilizar siempre dispositivos de retención homologados, como debe figurar en la etiqueta del dispositivo.
  • Es importante evitar llevar al niño en los brazos o usar el mismo cinturón de seguridad que el adulto para protegerlos.

Los expertos en seguridad vial infantil lo tienen claro: la postura más segura para el niño es viajar en sentido inverso a la marcha. Y esto es así porque esta posición reduce un 80% el riesgo de sufrir heridas en un niño de hasta 4 años, según lo afirma la Organización Mundial de la Salud (OMS).

 

¿Cómo elegir el sistema de retención infantil?

 

Los niños, especialmente los bebés, son mucho más vulnerables que los adultos en un accidente de tráfico. Ésto se debe a que los elementos de seguridad pasiva de la mayoría de automóviles del mercado (cinturón de seguridad de 3 puntos y airbags frontales y/o laterales) han sido diseñados pensando en los adultos, ocupantes que miden más de 150 cm de altura”.
Lo primero que debemos hacer al comprar un SRI es buscar una etiqueta de color naranja, símbolo de que está homologado. El siguiente paso es fijarnos en la altura y peso de nuestro niño, ya que la clasificación se hace por kg y cm:

  • De 40 a 85 cm, instalación a contramarcha.
  • De 45 a 105 cm, instalación a contramarcha o normal. En esta etapa, es aconsejable que el cabezal del respaldo tenga forma de «V» para proteger tanto la cabeza como los hombros del niño.
  • De 100 a 150 cm, instalación normal.

En cuanto tengas hecha una primera selección y dudes entre diversos modelos, antes de decantarte por uno de ellos comprueba que es compatible la instalación al interior de tu coche.

Estos son los puntos básicos a tener en cuenta antes de elegir el SRI adecuado, pero hay otros aspectos en los que es conveniente fijarnos. Uno de ellos es el anclaje del cinturón. Algunos estudios han advertido que los cinturones de tres puntos de anclaje, que se utilizan para sujetar al ocupante en los elevadores, podrían no ajustarse correctamente al niño, colocándose por encima del abdomen.